Soft skills se convierten en una ventaja competitiva en el mundo laboral

Empresas
Typography

Empresas valoran las habilidades blandas al momento de contratar personal, según estadísticas de la ENHAT.

Actualmente, se está oyendo hablar más de las habilidades blandas y su importancia en la vida diaria.

Uno de los aspectos donde el tema tiene mayor relevancia es al momento de la búsqueda de trabajo, ya que diferencian significativamente a un candidato de otro. Pero, ¿qué son exactamente este tipo de habilidades? Las habilidades blandas son un conjunto de competencias sociales, que permiten al individuo desarrollar la comunicación asertiva y el relacionamiento efectivo con su entorno. A diferencia de las habilidades duras —aquellas que se basan en los conocimientos adquiridos—, no se aprenden en la universidad.

La manera de contratar al personal ha evolucionado. Ya no es suficiente con haber estudiado una carrera. Ahora se necesita más para encajar en los perfiles solicitados por las empresas y obtener una ventaja frente al resto de postulantes. Según la reciente Encuesta de habilidades al trabajo (ENHAT), publicada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la falta de habilidades emocionales es una de las principales causas de que una vacante sea difícil de cubrir (32.3%).

El estudio también indica que las cualidades más complicadas de encontrar entre los postulantes a un empleo son trabajo en equipo (38.4%), comunicación (31.9%), responsabilidad (31.2%), estabilidad emocional (23.7%), resolución de problemas (23.7%), liderazgo (23.5%), manejo del tiempo (20%), extraversión (18.3%) y amabilidad (17.8%). “Las habilidades blandas inciden en la confianza, lo que afecta a la productividad organizacional y eficiencia de los equipos. Estas deberían ser desarrolladas desde temprana edad.

Por eso, la solución que proponemos es incentivar a los escolares a mejorar estas habilidades, las cuales les ayudarán a comunicar sus ideas y proyectar sus talentos. Esto les servirá como herramienta en su futuro laboral”, comentó Óscar Guillén Pacheco, director ejecutivo de Panal Perú, ONG dedicada al empoderamiento de estudiantes para que sean líderes de sus comunidades.

Por eso, se hace necesario que el trabajador tenga un balance adecuado entre habilidades blandas y duras; ya que, “solo en una de cada cuatro vacantes se contrataría a alguien con habilidades técnicas óptimas sin reparar en sus habilidades blandas”, según el estudio. Además, señala que las empresas ya están tomando medidas para cubrir puestos laborales difíciles, como mayores esfuerzos de reclutamiento, capacitaciones a los trabajadores actuales y aumento de sueldos. Además, la ENHAT reveló que el 64% de postulantes a las vacantes directivas presenta deficiencias en el liderazgo. “Las empresas quieren que sus ejecutivos sean líderes, no jefes. Requieren personal que busque inspirar a su equipo. Para lograrlo, las habilidades blandas son imprescindibles.

La idea de un dictador carismático como jefe ha muerto. Necesitamos enseñarles a los trabajadores a desarrollar su inteligencia emocional”, aseguró Guillén.