El teletrabajo exige garantizar la seguridad de la infraestructura física

Educacion ejecutiva
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La nueva normalidad, en la que los empleados combinarán tiempos de trabajo en casa con el regreso paulatino a las oficinas, exige mayores niveles de seguridad.

En medio de los cambios que ha traído el teletrabajo, los directores de TI y los líderes de innovación se enfrentan al reto de asegurar la continuidad de la operación con base en la adecuada gestión de los recursos tecnológicos. ¿Qué hacer para que los colaboradores tengan acceso a los entornos de red y a las aplicaciones desde sus casas? ¿Cómo mantener los niveles de seguridad controlados? ¿Cómo preservar la buena gestión de TI ahora que se combinarán las modalidades de trabajo: tanto remoto, como en las oficinas? “A raíz del COVID-19, las organizaciones han tenido que dar paso a escenarios no controlados.

Las políticas de seguridad informática se han flexibilizado y los riesgos de seguridad cibernética han aumentado”, explica Vladimir Linares, Technical Systems Engineeer de Panduit, compañía que opera en 112 países y que se especializa en soluciones avanzadas de infraestructura física, eléctrica y de red para entornos empresariales. En su concepto, “la nueva normalidad, en la que los empleados combinarán tiempos de trabajo en casa con el regreso paulatino a las oficinas, exige mayores niveles de seguridad.

Por tal razón, es necesario que las empresas adopten, entre otras las siguientes medidas: adecuación de sistemas de cableado mucho más inteligentes, configuración de nuevas políticas de seguridad, mayor monitoreo y sistemas avanzados de alarmas, que logren advertir a tiempo posibles ataques o situaciones anormales”. Panduit responde a estas necesidades a través de un conjunto de herramientas que ofrecen soporte proactivo de seguridad en redes. La primera de ellas es Smartzone Connectivity, sistema inteligente de monitoreo de red.

Incluye entre sus componentes: panel de conexiones, panel de administración, cables de conexión y bandeja de fibra, así como alarmas en tiempo real y trazabilidad de las conexiones. “Con esta solución se pueden enfrentar situaciones relevantes de conectividad, continuidad del negocio y seguridad de los datos.

Incluye configuración de políticas de seguridad por puerto, monitoreo y seguridad; información en tiempo real sobre la conectividad de la red; monitoreo y alertas de cualquier cambio o alteración; opción de interconexión y conexión cruzada; lo mismo que mapeo de cables y rastreo visual”, afirma Linares. En cuanto a desafíos como el acceso de intrusos a las redes, uno de los más frecuentes en la actualidad por las vulnerabilidades creadas, Linares resalta el valor que ofrecen productos de seguridad física como SmartKeeper, que ofrece mecanismos de bloqueo para evitar el acceso no autorizado a puertos abiertos, agregando una capa física al sistema de seguridad que ya existe. “Funciona como una llave maestra que controla múltiples dispositivos para bloquear una variedad de puertos abiertos, lo que reduce el riesgo de daños intencionales o no intencionales.

Ahorrando tiempo y dinero a las organizaciones asociados con violaciones de datos, tiempos de inactividad de la red y reparación de la infraestructura”.