La era del 5G ya se inició en algunas ciudades de Estados Unidos y en toda Corea del Sur, prometiendo un enorme salto en la capacidad de los teléfonos inteligentes y en otros dispositivos. Pero la mayoría de países, entre ellos varios de América Latina, aún están en fase de pruebas de esta conexión, que será crucial para la tecnología futura, como la llegada de los autos sin conductor.
La cuenta regresiva para la revolución de la 5G ha comenzado; y con ello se tendrá una serie de beneficios como la explosión de los dispositivos conectados, tales como teléfonos móviles, televisores, sistemas de seguridad, altavoces, y demás dispositivos. Según los entendidos esta nueva red transformará nuestra forma de vivir y trabajar, ya que trascenderá la banda ancha móvil y tendrá efectos en los desarrollos humanos autosustentables como las ciudades inteligentes, la robótica y los automóviles sin conductor, además de que fomentará la innovación en sectores críticos como la salud, la agricultura y la educación.
Beneficios en muchos campos
En otras ventajas que trae esta red, su uso traerá mejoras en la atención médica conectada, por ejemplo, ayudarán a las personas a llevar registros de sus padecimientos y a manejarlos, además de que permitirán que los profesionales de la salud hagan pruebas y diagnostiquen a los pacientes a distancia. De hecho, la red 5G tiene el potencial de que los cirujanos operen a los pacientes a través de un robot, a miles de kilómetros de distancia. Esto es posible gracias a las capacidades de latencia baja de la red 5G. Con las redes actuales, la información tarda aproximadamente 100 milisegundos en viajar por la red. Pese a que es increíblemente rápido, sigue habiendo un retraso que imposibilita la comunicación en tiempo real. Pero, con esta red se espera que la latencia se reduzca a un milisegundo y con ello se tendrá prácticamente una comunicación en tiempo real.
¿En qué consiste?
Se trata de la quinta generación de estándares inalámbricos móviles basados en el estándar IEEE 802.11ac de tecnología de banda ancha. Es la nueva tecnología sucesora de la red de telefonía móvil 4G, cuya misión será agilizar la experiencia de navegación y descarga en internet. Promete mejorar enormemente la velocidad, cobertura y capacidad de respuesta de las redes inalámbricas. ¿De qué tan rápido estamos hablando? Sería en unas 10 a 100 veces más rápida que la conexión celular actual, y aún más rápida que cualquier cosa que se pueda obtener con un cable de fibra óptica.
Automóviles autónomos
Sobre los videojuegos y el gamming, la velocidad de comunicación de datos permitirá disfrutar de mejor contenido, con más detalle gráfico, mayor participación de usuarios, cambiando también la experiencia del usuario en ese ámbito. En cuanto a los sistemas autónomos, ¿se imaginan que Uber o Cabify desplieguen automóviles sin conductor? Bueno, no estamos hablando de ciencia ficción. Hoy en día los vehículos autónomos existen e incluso operan en algunos sectores industriales (como la minería) desde hace años por razones de seguridad. En cuanto al tema de seguridad, se podrá contar con cámaras de seguridad más pequeñas y más fáciles de montar y de cambiar en caso de ser necesario, ya que no habría que mover un enlace, por ejemplo. Por otro lado, la resolución de las imágenes podría ser mayor, considerando que hoy en día el streaming de datos es una limitante en la calidad de las imágenes y no la capacidad de resolución de lentes y sensores. Con ello, se abre las posibilidades a otras aplicaciones, donde el análisis en tiempo real de imágenes a través de software o hardware podrá contar con mejor detalle y resolución.
