Expertos de SGS recomiendan aplicar plan de control para evitar riesgos financieros y operacionales.
¿Qué ocurriría si en un gran proyecto minero una de las grúas falla? La producción se detendría y se generarían millonarias pérdidas que afectarían directamente la rentabilidad de la mina. Ellos sin contar los riesgos que representan para la integridad de los trabajadores, el que un equipo de esta magnitud deje de operar por algún desperfecto.
Para evitar este tipo de riesgos financieros y operacionales, es crucial contar con un plan de inspecciones para los equipos de maquinaria pesada en minera. Al respecto, Pedro Gamarra, Gerente Comercial Industrial Service de SGS Perú, explica que las inspecciones tienen dos finalidades: Garantizar la disponibilidad del equipamiento, es decir, acreditar que esté disponible para operar; y respaldar la seguridad del operador y de las personas que están interviniendo en la operación. Si se trabaja con un equipo propenso a sufrir de fallas se puede afectar a alguien o causar un accidente fatal, por ello la relevancia del tema”.
Gamarra explicó que lo recomendable en la industria es programar un mantenimiento para que se realice las inspecciones, con el objetivo de que si se tiene que hacer algún cambio se realice y luego se retome el trabajo, sin interrupciones no planeadas.
El vocero recalcó, que la maquinaria pesada en minería varía según el proyecto y el tipo de mina, “Existe en la industria equipos de izaje, de línea amarilla, y de tajo abierto, toda esta maquinaria cuenta con especificaciones técnicas y demanda diferentes procesos para validar su control de calidad”.
Tan importante como el excelente estado de las maquinarias es que los trabajadores que laboran con ella o en torno a ella sepan como darle un correcto funcionamiento y utilidad.
En ese sentido, Emerson Sifuentes, director de SGS Academy, Centro de Formación profesional de SGS, destacó: “La maquinaria pesada en minera demanda de un personal altamente capacitado en su manejo, desde su armado, operación y mantenimiento”.
Sobre ello, Sifuentes destacó que la capacitación que deben recibir los colaboradores encargados depende del tipo de maquinaria, el tipo de actividad por desarrollar y la etapa en que se encuentre el proyecto (restructuración, extracción, distribución, almacenamiento, inducción, etc.)
¿Con qué frecuencia el sector minero debe realizar una capacitación?
Sifuentes sostuvo que, según normativa, la capacitación debe ser impartida una vez al año. Sin embargo, el periodo de formación va a depender de las necesidades propias de cada empresa, el sector y la etapa del proyecto. “Por ejemplo, si el proyecto se encuentra en plena operación, es obligatorio capacitar una vez al año, pero si sigue aumentando la carga y demanda de personal lo recomendable es que se realice un diagnóstico del nivel de competencia y de cultura de prevención para poder reconocer la verdadera necesidad de formación” indicó.
Este tipo de capacitaciones pueden variar desde una capacitación puntual, o sea una máquina en específico, hasta programas integrales con reforzamiento para observar el comportamiento del colaborador al maniobrar el equipo y acreditar su manejo de forma eficiente y segura.
“Existe en la industria, maquinaria tan compleja que se exige a la empresa que el personal cuente con la acreditación necesaria para su manejo, la normativa del sector minero busca el trabajo sea seguro, que haya un bajo o cero niveles de accidentabilidad, entonces se necesita personal calificado” destacó.
