Habilidad blanda : Adaptarse para avanzar

Educacion ejecutiva
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Adaptación al cambio como la clave para subsistir en el mundo moderno.

Por: Lydia Arbaiza,PhD

Profesora Principal ESAN

 Según lo mencionado anteriormente en el primer artículo sobre Habilidades blandas, a lo largo de todos estos años, tanto la economía, como la política y la administración han estado en constante cambio, y en el último siglo la tecnología revolucionó al mundo. Esta transformación también influyó en las empresas.

Es por ello, que la Adaptación al Cambio puede llegar a convertirse en una necesidad para ellas y una característica esencial que buscan en los ejecutivos; ya que, en la actualidad laboral el mundo es más competitivo y vive en una constante evolución. Cada miembro de una organización debe ser consciente y sentirse identificado con los objetivos trazados por la empresa para mejorar el rendimiento de la misma y sobretodo destacar en un entorno de gran competitividad.

Este entorno se encuentra día a día frente a cambios constantes que podrían exigir reestructuraciones y la adaptación de las mismas entidades. Por esta razón, una de las cualidades indispensables en un líder es la adaptabilidad que le permita estar preparado ante los cambios radicales que suceden dentro de la empresa o en el entorno que puede afectarla directamente.

Estos cambios tienen la característica de ser, por un lado, previamente preparados o proyectados, como una nueva política, una nueva estructura, nuevos objetivos, cambio de imagen, etc., que involucra a toda la organización o por lo menos a una gran parte lo cual necesita una reacción adaptativa. Por otro lado, los cambios pueden ser inesperados, estos suelen provenir del entorno que afecta a la empresa y aparecen sin alguna acción planificada.

La tecnología y todo el mundo digital provoca estos cambios a gran velocidad, ser innovador se convierte en una necesidad, lo cual exige un aprendizaje constante. Estos cambios pueden ser positivos como, también, desfavorables para la empresa, lo cual obligará a los ejecutivos estar preparados y adaptarse con el objetivo de mejorar la situación de la entidad y hacerla competitiva. No todas las personas están dispuestas a realizar cambios, debido a esto un líder, al tener influencia en su equipo, tiene la capacidad de transmitir y orientarlo para que así también ellos logren adaptarse a estas transformaciones sin alterar o dañar la organización.

La participación de los líderes es un requisito clave para lograr que los demás miembros de la organización se comprometan a ser parte de estos cambios, a través de la motivación. La adaptación actúa con el fin de equilibrar las necesidades internas de la empresa con las oportunidades que el entorno le presenta, la cual se refleja en el éxito, la satisfacción de los miembros y el desarrollo de la organización.

Esta, se logra a través de la guía de los gerentes que son líderes, la exploración e investigación constante de lo que sucede en el entorno y en la empresa, la gestión y evitando aferrarse a lo que se tiene. La capacidad para adaptarse de una organización llega a influir favorablemente en el aprendizaje de sus colaboradores, la creatividad y la innovación; ya que, en ellos es donde se presenta la habilidad para entender las necesidades y deseos de sus clientes que finalmente les permite realizar un cambio cuando éste sea necesario o demandado.

Al crearse un cambio, la organización debidamente preparada es capaz de crear formas adaptativas para cumplir con las necesidades variables que el mercado presenta, responder rápidamente a situaciones coyunturales, pero sobretodo puede anticipar cambios futuros. Una organización a cargo de líderes con la habilidad de adaptarse, empoderan e integran a sus colaboradores en el desarrollo de la innovación para que en conjunto aumenten su flexibilidad, reconozcan las demandas de su competencia, respondan y satisfagan las necesidades de los clientes desarrollando mejores e innovadoras propuestas para ellos, las cuales resultan atractivas y competitivas.

En la actualidad el trabajo es más flexible y dinámico, por este motivo es que la adaptabilidad implica directamente la flexibilidad de la organización no solo con su entorno, sino también con sus miembros. Conocer cada vez más a ambos mundos contribuye al mejor manejo y preparación ante los cambios que vendrán. Aquellas personas que estén dispuestas a lograr comportamientos que abordan condiciones cambiantes obtienen mejores resultados para su eficiencia y eficacia dentro de las empresas, que es justamente lo que el mundo moderno demanda.